Hoy os presento la Mammillaria Lenta. Procedente de México, la conocemos también con el nombre vulgar de cabeza blanca. Este cactus lo podemos distinguir con facilidad por qué tiene la punta un poco hundida y llena de pinchos muy pequeños enroscados entre sí. Las espinas son de color blanco (de aquí su nombre vulgar), crecen en forma de espiral y entro las espinas y el cuerpo del cactus podemos apreciar una lanosidad blanca.
En cuanto a las flores, son relativamente pequeñas en comparación con la planta, miden unos dos centímetros y medio; acostumbran a ser de color blanco o rosado, muy vistosas a la vista y van acompañadas de unos frutos de color rojo intenso que la verdad, resultan muy decorativos. Como que son cactus que no suelen crecer mucho (entre quince y veinte centímetros de altura) son muy adecuados para plantarlos en macetas, jardineras o incluso, en algún caso para crear unas rocallas. A pesar de que crecen con más facilidad a pleno sol, durante el verano si la radiación es muy elevada, os recomiendo que lo tapáis con algún tipo de parasol, para evitar posibles quemaduras.
A la hora de regar, no tengáis miedo: en verano, una vez por semana, en la primavera una vez cada quince días, en otoño una vez al mes y cuando empiece el frío, dejar de aportar agua hasta la primavera siguiente. Si bien es cierto que no debéis temer regarlo, vale más que os fijéis si la tierra está seca antes de volver a dar agua a vuestro cactus.
Para acabar, a diferencia otras especies, la Mammillaria Lenta no tiene muchos problemas con las plagas, lo que debéis tener en cuenta es el exceso de humedad, puesto que puede pudrir los tejidos y las raíces y esto lo puede llevar en la muerte.
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