La crasula que os presento hoy sin ningún tipo de duda es de las más curiosas y originales que os he explicado hasta la fecha. Se trata de la Crasula Barklyi y recibe el nombre vulgar de cactus cola de serpiente de cascabel, y se entiende perfectamente que tenga este nombre gracias a la forma que tiene, que sin duda recuerda a la cola de este réptil. Procede de África del sud y hay que decir que es de las plantas crasas más extrañas que hay. Crece hasta diez centímetros de altura y se ramifica desde la base.
Es de crecimiento lento, sus hojas están dobladas de tal manera que se amontonan las unas sobre las otras, y a medida que va creciendo y el tallo se va estirando, se van abriendo. Mientras están cerradas, forman unos pilares muy sólidos. Es de las pocas especies que sobrevive sin problemas en el interior de casa si está ubicada en una habitación donde tenga buena iluminación.
Si la tenéis al exterior, la tenéis que poner a un lugar donde tenga sol directo, puesto que es lo más ideal para ella. Tenemos que tener en cuenta el riego, de no proporcionarle demasiada agua, pues esto será fatal y acabará con la planta. En este caso, la manera de regar es un poco diferente que alguna otra variedad, porque de octubre a mayo se tienen que regar muy poco, y de mayo a octubre regando cada quince días es suficiente. Si necesita agua lo notaréis fácilmente con las hojas, que veréis que se arrugan un poco.
De las flores no hay gran cosa a decir, son extremadamente pequeñas, blancas y no tienen tallo. Aparecen normalmente en invierno. Aguanta temperaturas mínimas de hasta siete grados negativos, pero no es necesario exponerla en este frío, lo ideal es mantenerla a los diez grados positivos.
Para acabar, son susceptibles a las cochinillas o a enfermedades fúngicas aparte del exceso de agua que lo único que hará será pudrir esta extraña planta.


Valoraciones
No hay valoraciones aún.