El Adromischus Caryophyllaceus es una suculenta procedente de África del sur que se ramifica muy fácilmente con unos tallos rectos o ligeramente inclinados de color verde azulado pálido o de verde grisáceo a verde-amarillo. Puede crecer hasta 35 centímetros de altura cuando es tiempo de florecer.
Cada hoja hace de tres a cuatro centímetros de largo por dos de ancho. Normalmente, en las puntas de estas aparece una coloración marrón. Las flores son tubulares, de hasta 2 centímetros de largo y con unos colores que van desde el rosa brillante al púrpura.
Tolera condiciones frescas siempre que sean sin heladas, por eso no lo expondremos a temperaturas inferiores a 2 grados positivos. Regaremos generalmente desde la primavera hasta mediados de otoño, aportando agua cada quince días cuando haga más calor y una vez al mes cuando las temperaturas empiecen a disminuir. Esperar que el sustrato se haya secado completamente antes de volver a aportar agua.
Es una de las variedades más fáciles de reproducir, puesto que la suculenta misma deja caer las hojas, que si las ponemos en contacto directo con el sustrato será la manera de crear otro ejemplar. Por el contrario, si no desprende ninguna hoja tendremos que usar una navaja muy bien afilada para cortar los ejemplares que más nos gusten.


Valoraciones
No hay valoraciones aún.