La Crassula Falcata es considerada una de las más atractivas para los ojos de los coleccionistas de cactus y suculentas. Es nativa del Cabo de Buena Esperanza en la región de Suráfrica. Se conoce con el nombre vulgar de planta avión o con los sinónimos científicos de Crassula perfoliata var. falcata o Crassula perfoliata var. minor.
Tiene un crecimiento arbustivo y no acostumbra a pasar de los sesenta centímetros de alto, pero hay algún caso excepcional que ha pasado el metro de altura. Las hojas son de color verde-grisoso y la forma que hacen las hojas es lo que puede recordar a las alas de un avión. Crecen apiladas y en pareja, lo que la hace una planta todavía más curiosa. Las flores son todavía más curiosas. Florece dos veces al año, haciendo unas flores de un rojo intenso creciendo arriba del todo de un tallo formando pequeños grupos que juntos, pueden recordar a las flores de la planta crasa Kalanchoe. Además de ser muy vistosas, tienen un agradable olor dulce.
Resiste sin muchos problemas al calor y a los climas secos, incluso aguanta heladas a condición de que sean puntuales. Es importante que durante el invierno tenga el sustrato seco y esté en un ambiente seco o muy poco húmedo para evitar que se pudra. El riego es suficiente con una vez cada quince días tanto en la primavera como el verano y en otoño e invierno (sobre todo invierno) dejar de aportar agua completamente. Si se da el caso que estáis en un lugar donde el otoño no es muy frío, os podéis permitir regarlo una vez al mes, eso sí, en invierno ya sea un ambiente donde no haga frío, dejar de aportar agua hasta la siguiente primavera.
Prefiere tener entre cuatro y seis horas de sol directo si está al exterior, si esto no es posible y lo tenéis en el interior de casa, procurad tenerla cerca de una ventana donde reciba la mayor cantidad de luz posible, y si le da el sol directo ni que sean tres horas, todavía mejor. Os aguantará bien también si la tenéis en semisombra. Finalmente, como he dicho antes, con un exceso de humedad y agua, es muy fácil que se pudra, por lo tanto, siempre nos tenemos que asegurar que en el momento que lo reguemos, esperemos que el sustrato esté completamente seco entre riego y riego.
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